martes, 10 de enero de 2012

¿Rebajas?

Intento no ir a comprar en rebajas porque no soporto caminar sobre ropa. Y, aun así, este año he hecho una excepción: fui a un centro comercial el primer día de rebajas con una amiga (si no es bastante estresante ir sola). A mis problemas con la orografía textil también podría añadir la cara de decepción cuando entro a una tienda y descubro lo mucho que se han esforzado por esconder la ropa "decente" y recuperar prendas que no vendieron hace diez temporadas. Estas prendas son muy útiles para disfrazarse en el probador, y tendría su chispa si quedase alguno libre.

Al llegar, recordé otra de las razones por las que dejé de ir: me cabrean los descuentos del 10% resaltados como un esfuerzo descomunal y que suponen un par de euros por prenda. Es fácil decepcionarse ante tales ofertas, porque el gasto en el desplazamiento y tiempo suele ser superior al ahorro.

Por ejemplo: mi amiga hizo cola durante, digamos, a ojo, media hora, para pagar un jersey que anteriormente valía 20 euros, marcaba 15 y finalmente costaba 18. Este fallo es tan recurrente que ya no creo en las equivocaciones a la hora de etiquetar...Es lógico: nadie desecha una prenda que cuesta tres euros más después de ocupar todas las baldosas de la tienda haciendo cola, a menos que no lleve dinero para pagarlo o se sienta lo suficientemente engañado como para desperdiciar el tiempo que ha invertido hasta llegar a caja. 

Pero mejor fue el ofertón que descubrió mi primo Norberto en Zara: 



1 comentario:

  1. menuda sorpresa...al ver que la prenda valía mas caro en rebajas que comprandolo en temporada jajajaja

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